Durazno

¿Desde qué edad se sugiere dar como alimento?: 6 meses de edad en adelante

Rico en hierro: No

Es rico en Zinc: Si

Es rico en vitamina D: No

Es rico en omega-3: No

Es conocido por generar alergias: No

¿Cuándo pueden comer durazno los bebés?

El durazno puede ofrecerse al bebé tan pronto como esté listo, generalmente alrededor de los 6 meses de edad, siempre y cuando la fruta esté bien madura, suave o cocida hasta obtener una textura tierna.

¿Es el durazno saludable para los bebés?

Sí. Los duraznos aportan carbohidratos, fibra y líquidos, además de potasio y vitaminas A, C, E y K. Estos nutrientes proporcionan energía para el gateo y la exploración, apoyan la salud digestiva y ayudan a mantener al bebé hidratado/a. Además, favorecen el equilibrio de electrolitos, la salud de la piel, la visión, la absorción de hierro, la inmunidad y la coagulación sanguínea. Los duraznos son especialmente útiles para bebés con estreñimiento.

¿Es el durazno un alérgeno común?

No. Las alergias al durazno son poco comunes, aunque las personas con síndrome de alergia oral (también conocido como síndrome de alergia alimentaria al polen), especialmente aquellas sensibles al polen de abedul o de pasto, pueden tener sensibilidad al durazno. Además, quienes son sensibles a otras frutas de la familia de las rosáceas, como los albaricoques, almendras, nectarinas y ciruelas, podrían experimentar algo similar con el durazno.

El síndrome de alergia oral suele causar una sensación de picazón, hormigueo o ardor leve y temporal y es poco probable que provoque una reacción grave. Los duraznos cocidos, enlatados o pelados pueden minimizar o incluso eliminar esta reacción.

Al introducir cualquier alimento nuevo, comienza con una pequeña cantidad y, si no hay reacción adversa, aumenta gradualmente la cantidad en futuras comidas.

¿Son los duraznos un riesgo de ahogamiento para los bebés?

Sí. Los duraznos, especialmente cuando no están maduros, pueden ser resbaladizos y firmes, características que incrementan el riesgo de ahogamiento. Para reducir este riesgo, asegúrate de preparar y servir los duraznos de acuerdo a la edad y habilidades del bebé, y permanece cerca durante las comidas.